La escórpora o cabracho

La escórpora o cabracho (Scorpaena Scrofa) es una de les especies que más se pueden vislumbrar durante las inmersiones por la costa catalana. Es uno de los más buscados y también extraño por su aspecto. Un pez que puede medir hasta 20 centímetros de longitud y que se caracteriza por presentar unas espinas que le recubren gran parte de su cuerpo y por sus tentaculosos ojos, así como las protuberancias que asoman por su barbilla. Es de color rojizo, aunque puede cambiar de color, salpicado con manchas claras y oscuras que le permiten camuflarse en la profundidad. Su hábitat son las zonas rocosas de una profundidad, a partir de los 20 metros y se alimenta de crustáceos y peces que caza al acecho, absorviendo a la presa.


Cuando se siente amenazado, este pez alza la aleta dorsal de forma pasiva, ya que en ningún caso ataca y, en la mayoría de casos, espera para huir. Gracias a su aspecto, la escópora o carbacho suele camuflarse con facilidad en el fondo marino y no es extraño confundirle con una roca. Por este motivo, se puede clavar una de sus espinas que producen un fuerte dolor e hinchazón en la zona, aunque no reviste gravedad.
Un pez que también presenta en la oferta culinaria de nuestro país, sobre todo, en caldos y sopas.